"¡INMENSO! ¡Qué juego! ¡Qué jugadores!", escribió Sall, también presidente de turno de la Unión Africana (UA), en su cuenta de la red social Twitter poco después del final del partido.
"Habéis rendido homenaje, en este día memorable, al ilustre Papa Bouba Diop.¡Id a tocar las estrellas ahora!", agregó el jefe de Estado, en alusión al centrocampista senegalés, autor del gol del triunfo contra Francia en el partido inaugural del Mundial de Corea-Japón 2002, de cuya muerte se cumplieron este martes dos años.
Un gol del defensa senegalés Kalidou Koulibaly en el minuto 70, instantes después del 1-1 anotado por el centrocampista ecuatoriano Moisés Caicedo, eliminó a Ecuador del Mundial y clasificó para los octavos de final a Senegal, como segunda de grupo, por detrás de Países Bajos.
Los campeones de África merecieron la victoria al mostrarse más incisivos y decididos a ganar el encuentro que les permitía superar, por segunda vez en su historia, la fase de grupos de un Mundial, veinte años después de que alcanzaran los cuartos de final en la Copa del Mundo que se disputó en 2002 en Corea del Sur y Japón.